Watch the Birdie! – Anita O’Day
¡Mirad al pajarito!
Esta expresión viene de los años 20, y viene de emplear pájaros de latón con movimiento y sonido para conseguir la atención de los niños y poder así fotografiar su cara completa, sonriente y quieta pero con los ojos abiertos. Como dice la canción, “mira al pajarito, deja que vea esa sonrisa bonita, y sostenla!” En una época en la que la mayoría de los niños tenían como juguetes algún trapo viejo multiforme o muñecas raídas que habían pasado de generación en generación, ver a un pájaro encima de la cámara del fotógrafo que mueve las alas e incluso en algunos casos silba (gracias a un pequeño depósito de agua que se activaba con una pera de goma) era algo impresionante.
Anita O’Day tiene una historia interesante. Se la reconoce por su sentido del ritmo y dinamismo, y porque revolucionó el estereotipo femenino y poco significativo de “chica cantante” en big bands hasta llegar a ponerse al mismo nivel que los otros músicos de la banda. Se consideraba a sí misma una mujer jazz “hip” (recordaréis esta expresión de nuestro querido Cab Calloway y sus invenciones de palabras). Empleaba a menudo trajes de chaqueta iguales a los de la banda en lugar de vestidos de gala y cambió su nombre a O’Day por un juego de palabras en pig latin (juego de palabras inglés al estilo del “verlan” francés si algunos lo conocéis) con “dough”, dinero en jerga. Anita O’Day tuvo una operación de amígdalas de niña que la dejó un poco tocada de cuerdas vocales, y por ello no podía hacer vibratos. Se las arregló de otra forma para cantar, usando su voz más como un instrumento de percusión que melódico, fraseando breve pero contundentemente, casi punteando.
¡A Bailar pajaritos!